agrupacion: Los Recaudadores del Contrato Roto alianzas: Plutocracia de Acreedores de Selorith, Culto de Gyth’kai ciudad_sede: Selorith, Mor’dhul dg-publish: true edad: ‘120’ escudo: Una balanza de hierro desequilibrada, con un pergamino roto en un plato y una gota de sangre en el otro, sobre un fondo de obsidiana. lema: La deuda siempre se paga, con sangre o con alma. nombre: Maestro Kaelen Vex relaciones: Desciende del Clan Vexia (exiliado), Grakka (co-fundadora, desconfianza mutua), Plutocracia de Acreedores (clientes), Culto de Gyth’kai (patronos espirituales) rivalidades: Clan del Edicto Susurrante, Los Silentes rol: Maestro del Gremio tags: - ’ ’ - ’’’’ - ‘,’ - ‘[’ - a - d - e - g - h - i - j - l - m - n - o - p - personajes - personajes_y_agrupaciones - r - s - t - u tipo: Gremio categoria: Personajes y Agrupaciones subcategoria: Personajes summary: Kaelen Vex, elfo oscuro exiliado del Clan Vexia, fundó en Selorith el gremio “Recaudadores del Contrato Roto”, especializado en hacer cumplir pactos mágicos y deudas. Para él, romper un contrato es una herejía que debe ser purgada.

Maestro Kaelen Vex

Biografía

En un mundo regido por la espada y la magia, Kaelen Vex encontró su poder en la tinta y el pergamino. Nacido en el seno del Clan Vexia, una casa menor de Syrenya en el reino marítimo de Galvorn, su destino parecía sellado por la sal y las mareas. Sin embargo, mientras sus parientes soñaban con horizontes infinitos y vientos favorables, Kaelen encontraba consuelo en la lógica inmutable de los Mapas, los libros de cuentas y la jurisprudencia. Su falta de ambición náutica, vista como una afrenta a la tradición de su linaje, culminó en un exilio silencioso y deshonroso.

Liberado de las expectativas de su familia, Kaelen vagó por Lithernia hasta que sus viajes lo llevaron a las tierras sombrías de Mor’dhul. Allí, en la corrupta pero ordenada ciudad de Selorith, anidada en el infame Cañón de la Deuda, descubrió su verdadera vocación. En una sociedad donde los pactos mágicos eran ley y la palabra escrita un arma, la mente meticulosa de Kaelen floreció. Vio el caos inherente en los acuerdos rotos y la oportunidad de imponer un orden absoluto.

Fue en Selorith donde se cruzó con Grakka, una formidable mercenaria Hobgoblin cuya brutalidad era tan directa como la lógica de Kaelen era enrevesada. Juntos forjaron un pacto fundacional: Kaelen redactaría los contratos y los estatutos, y Grakka proporcionaría la fuerza para hacerlos cumplir. Así nacieron “Los Recaudadores del Contrato Roto”, un gremio que rápidamente se convirtió en el brazo ejecutor indispensable para la plutocracia de acreedores Tiefling y los comerciantes Goblin de la ciudad.

Bajo el liderazgo de Kaelen, el Gremio trascendió la mera matonería. Se convirtieron en especialistas, maestros del rastreo, la captura y la “liquidación” de deudas. Abrazaron el culto a Gyth’kai, la Diosa del Sacrificio, viendo cada cobro no como un acto de crueldad, sino como una ofrenda necesaria para restaurar el equilibrio cósmico roto por un juramento incumplido. Para el Maestro Vex, la deuda no es una cuestión de oro, sino de orden. Un contrato es una promesa sagrada, y su ruptura, una herejía que debe ser purgada. Mantiene una relación de calculada desconfianza con Grakka, a quien ve como una herramienta tan necesaria como peligrosa; su franqueza puede resolver un problema inmediato, pero amenaza la delicada red de legalidad y miedo que Kaelen ha tejido con tanto esmero.

Descripción Física y Equipamiento

Kaelen Vex es un elfo oscuro de Lithernia, de 120 años, cuya edad solo se manifiesta en la profunda sabiduría de sus ojos grises, agudos como el acero, que parecen analizar cada palabra en busca de lagunas y cada alma en busca de deudas ocultas. Su porte es erguido y austero, desprovisto de la gracia fluida de sus parientes de Eldrador, reemplazada por una quietud deliberada y precisa. Su piel tiene un tono ceniciento y su cabello, negro como la obsidiana, está recogido en una trenza pulcra y severa.

Viste túnicas de lana oscura de alta calidad, cortadas con una funcionalidad impecable que denota riqueza sin ostentación. Sus ropas están libres de adornos, a excepción del broche de plata que sujeta su capa: una balanza de hierro perfectamente labrada, el símbolo de su gremio.

Su equipamiento es un reflejo de su poder. No porta espada ni armadura visible, sino las herramientas de su oficio: * El Libro de Deudas: Un pesado tomo encuadernado en piel de una criatura desconocida (algunos susurran que es de un deudor legendario), cuyas páginas están llenas de contratos, nombres y sentencias, escritas con una caligrafía hipnóticamente precisa. El libro está protegido por glifos de abjuración. * La Pluma del Perjurio: Una pluma de cuervo encantada que, según se dice, tiembla en presencia de una mentira y cuya tinta, mezclada con una gota de sangre del firmante, sella pactos con una fuerza inquebrantable. * Daga de Contrato: Oculta en la manga de su túnica, lleva una fina daga de plata con Runas grabadas en la hoja. No es un arma para el combate abierto, sino una herramienta para firmar pactos de sangre o para ofrecer un “cierre de contrato” rápido y silencioso cuando la situación lo requiere.

Legado e Impacto en Lithernia

El Maestro Kaelen Vex es la encarnación de un tipo de poder único en Mor’dhul: no el de la fuerza bruta ni el del linaje divino, sino el de la burocracia convertida en terror. Ha tomado el concepto abstracto de la deuda y lo ha transformado en una fuerza tangible y temida, institucionalizando el cobro como un arte oscuro y una ceremonia religiosa.

Su gremio, Los Recaudadores del Contrato Roto, es una pieza clave en el ecosistema de Selorith, garantizando que el motor económico de la ciudad, basado en pactos despiadados, nunca se detenga. Para el resto de Lithernia, Kaelen y su gremio son una leyenda sombría, un recordatorio de que en las tierras oscuras, hay destinos peores que la muerte, y que la palabra escrita puede ser una jaula más fuerte que cualquier cadena de hierro. Su legado será el de haber demostrado que el orden, llevado a su extremo más cruel, puede ser tan aterrador como el más puro de los caos.