categoria: Reinos y Geografía cultura: Exploradora y Académica dg-publish: true fundador: Alaric el Trazador de Estrellas gobierno: Círculo del Horizonte (Gremio de Cartógrafos y Sindicato de Astrónomos) localizacion: Bahía del Horizonte nombre: Endaryth poblacion_razas: Humanos, Genasi de Aire, Semielfos, Medianos (Halflings) reino: Galvorn religion: Culto a Quiteon y Taladrios simbolo: Brújula dorada y sextante de plata con un viento arremolinado subcategoria: Ciudades tags: - ciudad - ciudades - galvorn - lithernia - reinos_y_geografía tipo: Ciudad Portuaria Académica title: Endaryth summary: Endaryth, fundada hace tres siglos por Alaric, es una ciudad portuaria y centro intelectual de Galvorn, dedicada a la cartografía y astronomía. Gobernada por el Círculo del Horizonte, destaca por sus astilleros, observatorios y la vasta biblioteca de mapas.
Donde la mayoría de las ciudades de Galvorn miran al mar en busca de comercio o guerra, Endaryth alza su vista a los cielos y al horizonte infinito. Situada en una bahía resguardada y bendecida con vientos constantes, esta ciudad portuaria es el corazón intelectual del reino marítimo. Sus muelles no solo albergan galeones mercantes, sino los elegantes y resistentes navíos exploratorios, construidos para desafiar los límites de los Mapas conocidos. Edificios de piedra caliza blanca y madera de roble marino se elevan hacia el cielo, coronados por cúpulas de observatorio y veletas artísticas que giran con la brisa. Endaryth no es una ciudad de guerreros, sino de soñadores, cartógrafos y astrónomos; un lugar donde un nuevo mapa estelar es más valioso que un cofre de oro.
Endaryth fue fundada hace tres siglos por el legendario navegante humano Alaric, conocido como “el Trazador de Estrellas”. A diferencia de otros capitanes que buscaban riquezas, Alaric estaba obsesionado con lo que yacía más allá del mundo conocido. Guiado por lo que él llamaba “los susurros de Quiteon en las velas y los secretos de Taladrios en la marea”, descubrió una bahía perfectamente protegida de las tormentas de Exion. Allí, junto a un pequeño grupo de eruditos, astrónomos y constructores de barcos, fundó un asentamiento dedicado a un único propósito: cartografiar toda Lithernia, tanto la tierra como el cielo.
La ciudad creció bajo el gobierno del “Círculo del Horizonte”, una alianza del Gremio de Cartógrafos y el Sindicato de Astrónomos. Aunque rinden lealtad formal al Consejo de Capitanes de Galvorn, Endaryth goza de una autonomía casi total en asuntos de conocimiento y exploración. Se ha convertido en un imán para los intelectuales del reino, un bastión de la razón y el descubrimiento en un mundo a menudo dominado por la guerra y la superstición.
El Muelle del Sextante: El corazón palpitante de la ciudad. A diferencia de otros puertos, este está impecablemente organizado. Aquí se encuentran los astilleros más avanzados de Galvorn, donde los Genasi de Aire trabajan junto a carpinteros Humanos para crear barcos más rápidos y resistentes. Las grúas de madera se elevan como esqueletos de gigantes, y el aire huele a brea, sal y madera recién cortada.
La Espiral del Céfiro: El centro espiritual y gubernamental de Endaryth. Es una torre alta y abierta, sin techo, diseñada para que el viento fluya libremente a través de ella. Sirve como templo principal a Quiteon y como sala de reuniones del Círculo del Horizonte. En su cima se encuentra un colosal astrolabio de bronce que se mueve con la rotación del planeta.
El Archivo de las Mareas: Una vasta biblioteca circular excavada en el acantilado, protegida de la humedad por Runas enanas. Alberga la colección de Mapas, cartas de navegación y bitácoras de viaje más extensa de Lithernia. Los eruditos, devotos de Taladrios, pasan aquí sus vidas preservando la historia de cada descubrimiento.
El Distrito de los Veleros: La zona residencial, con calles amplias y casas diseñadas para ser frescas y luminosas. Casi todos los hogares tienen un pequeño observatorio personal en el tejado o un balcón orientado hacia el mar, donde los ciudadanos pasan las noches observando las estrellas.
La vida en Endaryth está marcada por la curiosidad. Los niños no juegan a ser soldados, sino exploradores que dibujan Mapas de sus propios barrios. Las disputas se resuelven a menudo mediante debates de lógica en lugar de duelos. Por la noche, la ciudad se oscurece a propósito para minimizar la contaminación lumínica, permitiendo una visión perfecta del firmamento.
Su festividad más importante es el “Festival de la Primera Brisa”, que marca el inicio de la temporada de exploración. Los nuevos barcos son botados al mar mientras los ciudadanos lanzan cometas de papel con plegarias a Quiteon y deseos de buenos vientos. Una costumbre única es la existencia de “bibliotecas de bitácora”, pequeños puestos públicos donde los marineros dejan copias anónimas de sus diarios de viaje para que cualquiera pueda aprender de sus éxitos y fracasos.
La arquitectura de Endaryth es funcional y elegante, pensada para armonizar con el viento y el mar. Los edificios son aerodinámicos, con tejados curvos y grandes ventanales para capturar la luz. El símbolo de la ciudad —una brújula dorada sobre un sextante de plata— adorna puertas, banderas y las velas de sus barcos. El ambiente es de calma intelectual y optimismo. Se oye el constante murmullo del viento, el lejano martilleo de los astilleros y las discusiones animadas de los eruditos en las plazas. Es un lugar donde el futuro parece algo que se puede dibujar, medir y alcanzar.
El Errante Silencioso: Los marineros juran que, en las noches de niebla espesa, un barco fantasma navega silenciosamente por la bahía. Se le conoce como el “Errante Silencioso”, y se dice que su tripulación espectral busca eternamente un mapa que les muestre el camino de regreso al mundo de los vivos. La leyenda afirma que la bitácora del capitán, si pudiera obtenerse, contiene rutas a islas y continentes que desaparecieron tras el Cataclismo del Lilium.
El Atlas de los Ecos: El rumor más guardado en Endaryth es que el Círculo del Horizonte oculta un mapa maestro en las bóvedas más profundas del Archivo de las Mareas. No es un mapa común, sino el “Atlas de los Ecos”, un artefacto arcano que muestra la geografía de Lithernia en capas, revelando no solo el mundo actual, sino también cómo era antes del Lilium. Se susurra que facciones de Mor’dhul y Eldrador pagarían cualquier precio, o enviarían a sus mejores asesinos, para poner sus manos sobre un conocimiento tan poderoso.