categoria: Reinos y Geografía cultura: Dorathiliana dg-publish: true fundador: Lyraenus el Contemplador gobierno: Aristocracia Arcana (bajo la Mano de Hierro) localizacion: Las Cumbres del Firmamento nombre: Dorathil poblacion_razas: Eladrin, Altos Elfos, Shadar-Kai, Humanos, Semielfos reino: Eldrador religion: Adoración de Arzia (principal), Lerian, Thirogrim, Morgal subcategoria: Ciudades tags: - ciudad - ciudades - eldrador - lithernia - reinos_y_geografía tipo: Ciudad Observatorio title: Dorathil summary: Dorathil es una ciudad en las Cumbres del Firmamento, dedicada al estudio del destino y las estrellas. Fundada tras el Cataclismo del Lilium, alberga a Altos Elfos, Eladrin y Shadar-Kai, y destaca por su arquitectura de luz y mármol lunar.

Dorathil

Suspendida en las Cumbres del Firmamento, donde el aire es fino y frío, Dorathil es una ciudad que parece tallada en la propia noche. Es un monumento a la precisión cósmica, una espiral galáctica de mármol blanco y piedra lunar que se enrosca hacia un pináculo central. No hay estruendo ni caos; solo el silencio solemne de la contemplación y el tintineo de campanas de cristal que imitan los vientos astrales. Sus torres esbeltas se alzan como dedos hacia el cielo, coronadas por cúpulas de cristal que se abren para beber la luz de las estrellas. Los puentes que conectan sus distritos no son de piedra, sino de luz solidificada, arcos iridiscentes que brillan contra el terciopelo del cielo. Aquí, la vida se rige por la paciencia y el estudio del destino, una sociedad formal y contemplativa donde una demostración pública de emoción es la mayor de las vulgaridades.

Historia

Dorathil no nació de la rebelión, sino de la obsesión. Tras el Cataclismo del Lilium, mientras la mayoría de los elfos se afanaban en reconstruir sus glorias pasadas, un Noble Alto Elfo llamado Lyraenus el Contemplador se sintió atraído por el orden inmutable de las estrellas. Convencido de que la respuesta a la catástrofe y el camino hacia el futuro estaban escritos en el firmamento, guio a su casa a las cumbres más altas del reino.

Allí fundaron Dorathil, no como una fortaleza, sino como un instrumento. La ciudad entera fue diseñada como un gran observatorio, un lugar para estudiar los ciclos cósmicos y desentrañar los hilos del destino. Con el tiempo, atrajo a los Eladrin, cuya naturaleza feérica resuena con los ciclos y las estaciones, y a los Shadar-Kai, custodios de las sombras y los secretos que se ocultan entre la luz. Aunque el talento para la adivinación otorga un gran estatus social, Dorathil nunca ha desafiado a la Mano de Hierro. Sigue siendo una pieza leal, aunque distante y enigmática, del engranaje del reino de Eldrador, proveyendo profecías y conocimientos que la corona utiliza para mantener su poder.

Barrios y Zonas

Costumbres y Vida Cotidiana

La vida en Dorathil es un ritual constante. El día comienza y termina con la Vigilia Silenciosa, un período de meditación colectiva donde la ciudad entera se detiene para observar el amanecer o el anochecer. El saludo tradicional no es verbal; consiste en trazar en el aire la constelación bajo la cual nació la otra persona, un gesto de reconocimiento de su destino.

La mayor celebración es el Festival de las Estrellas Fugaces, una noche en la que la formalidad se relaja ligeramente. Los Eladrin danzan en los jardines y liberan deseos escritos en hojas de sicomoro encantadas, que se elevan y arden al tocar la atmósfera. Cuando un joven alcanza la mayoría de edad, no recibe una herencia material, sino una Lectura de los Hilos, una ceremonia privada donde los videntes más poderosos interpretan su carta astral para guiar su camino en la vida.

Arquitectura y Ambiente

La arquitectura de Dorathil es etérea y funcional. Cada edificio es a la vez una obra de arte celestial y una herramienta de observación. Las estructuras de mármol blanco están pulidas hasta reflejar el cielo, y la piedra lunar absorbe la luz estelar durante la noche para emitir un suave resplandor. El ambiente es de una calma casi opresiva. No hay mercados bulliciosos ni risas en las calles. El único sonido es el viento, las campanas de cristal y el murmullo de los Conjuros de adivinación que se tejen constantemente en las torres.

Leyendas Urbanas