agrupacion: Clan Garraumbría alianzas: - Clan Kromagul (Mor’dhul) - Facción ‘Primero la Piedra’ (disidentes de Valtoria) ciudad_sede: Villeshervil (Minas Exiliadas de Valtoria) dg-publish: true edad: 287 escudo: Un pico de montaña fracturado de granito negro, arañado por una garra de tres dedos de la que gotea una única lágrima de sangre carmesí. lema: Desde la sombra, la montaña sangrará. nombre: Grakkor Manorrota relaciones: - Vexia la Corruptora (consejera rúnica y enlace con Mor’dhul) - Durnak el Rompejuramentos (Heroes y lugarteniente) rivalidades: - Reina Valeria Bronzebrillo - Casa Dravonis - La Ciudad de Sylorian (símbolo de la cooperación enano-élfica) rol: Señor del Clan Garraumbría tags: - clan garraumbría - enano - lithernia - personajes - personajes_y_agrupaciones - villano tipo: Clan (Facción Terrorista) categoria: Personajes y Agrupaciones subcategoria: Personajes summary: Grakkor Manorrota, líder de los parias y jefe del Clan Garraumbría, busca destruir Valtoria desde dentro. Exiliado y marcado por su odio ancestral, usa magia oscura y alianzas con fuerzas prohibidas para imponer su venganza y purgar la montaña.

Grakkor Manorrota

Biografía

Grakkor Manorrota no es un rey bajo la montaña, sino una herida supurante en sus entrañas. Es el líder de los parias, el señor de la amargura y el rostro de la venganza que anida en las profundidades de Valtoria. Su historia no es una de gloria, sino de un odio destilado a lo largo de generaciones.

Nacido en el frío y húmedo exilio de las minas de Villeshervil, Grakkor es descendiente directo del Clan Picosombrío, un linaje enano que una vez fue respetado por su fervor Guerrero. Sus ancestros, devotos fanáticos de Valarios, el dios de la destrucción, llevaron su fe a un extremo sangriento durante la Gran Guerra. Mientras la doctrina oficial de Valtoria veía la destrucción como el preludio necesario para la creación de Rokael, los Picosombrío la abrazaron como un fin en sí misma, una purga sagrada para erradicar la debilidad. Sus rituales secretos y sus presuntas alianzas con los poderes oscuros de Mor’dhul les ganaron el oprobio del Concilio de la Montaña. Derrotados y declarados traidores por la Casa Dravonis, fueron despojados de sus títulos, sus nombres y su honor, y condenados a una vida de oscuridad.

Grakkor creció sin conocer la luz del sol ni el calor de una forja Noble. Su única herencia fue el rencor de los ancianos y las historias de una gloria robada. Para él, la paz de la Reina Valeria Bronzebrillo y sus alianzas con los “frágiles” elfos de Eldrador no eran un signo de progreso, sino la máxima traición a la verdadera esencia enana. En su juventud, demostró ser un líder nato, no por su carisma, sino por su capacidad para canalizar el odio colectivo en una fuerza tangible y destructiva.

Su apodo, “Manorrota”, no es una metáfora. Lo ganó durante un audaz acto de sabotaje contra una mina de la Casa Bronzebrillo. Al intentar corromper una runa guardiana ancestral, el artefacto colapsó, aplastando su mano izquierda en un amasijo de hueso y carne. En lugar de ver esto como una desgracia, Grakkor lo proclamó una bendición de Valarios: un sacrificio de carne que le otorgó una visión de acero. La mano destrozada se convirtió en el símbolo de su causa y en la prueba de que estaba dispuesto a romperse a sí mismo para quebrar la montaña.

Con este nuevo estatus de mártir, unificó a los exiliados bajo un nuevo estandarte: el Clan Garraumbría, y se erigió como la cabeza visible de la facción conocida como los “Cazadores de Sombras”. Su motivación es mesiánica y terrible: cree firmemente que Valtoria debe ser demolida desde dentro para renacer. Desprecia la diplomacia, aborrece la cooperación interracial y ve cada estatua, cada puente y cada tratado de paz como una blasfemia que debe ser purificada con fuego y fractura. Sus alianzas son pragmáticas; el pacto con el sádico Clan Kromagul de Mor’dhul le proporciona Recursos y magia prohibida, mientras que la facción clandestina ‘Primero la Piedra’ le ofrece espías y simpatizantes dentro de la propia Valtoria. Grakkor es un terrorista con la convicción de un profeta, un enano que busca derribar el cielo de su propio pueblo para demostrar que la única verdad reside en la roca rota.

Descripción Física y Equipamiento

Grakkor es la antítesis del Noble enano de los grandes salones. De 287 años, su cuerpo es correoso y compacto, endurecido por una vida de privaciones en lugar de ser robusto por la buena cerveza y la comida. Su barba, de un negro salpicado de vetas grises como el mineral, está trenzada con fragmentos de hierro oxidado y pequeños huesos. Sus ojos, hundidos y feroces, arden con la luz fanática de quien no conoce la duda. Su piel está pálida por la falta de sol y cubierta de viejas cicatrices de minería y combate.

Su rasgo más distintivo es su mano izquierda. Lo que queda de ella está permanentemente enfundado en un guantelete de hierro negro, una creación tosca y brutal forjada por él mismo. Las Runas grabadas en su superficie no son de protección, sino de debilitamiento y corrosión. El guantelete sirve tanto como símbolo de su sacrificio como de arma contundente en el combate cuerpo a cuerpo.

Equipamiento:

Legado e Impacto en Lithernia

Para la mayoría de los habitantes de Valtoria, Grakkor Manorrota es poco más que un cuento de terror, el nombre susurrado para asustar a los niños y una justificación para reforzar las patrullas. Pero para la Reina Valeria y el Concilio de la Montaña, él es la amenaza interna más peligrosa y tangible. Es la prueba viviente de que las viejas heridas de la Gran Guerra nunca sanaron del todo y que el extremismo puede florecer incluso en el corazón de la raza más estoica.

El impacto de Grakkor es el de la paranoia. Cada derrumbe en una mina, cada fallo en una forja rúnica, cada disputa diplomática con los elfos de Eldrador es ahora vista con la sospecha de la intervención de los Cazadores de Sombras. Ha obligado a Valtoria a mirar hacia adentro, a desconfiar de sí misma, desviando Recursos valiosos de la defensa contra Mor’dhul para dedicarlos a la contrainteligencia.

A largo plazo, el legado de Grakkor podría ser catastrófico. Si tiene éxito, podría hundir a Valtoria en una sangrienta guerra civil, destrozando sus alianzas y convirtiendo el reino más estable de Lithernia en una fortaleza aislada y xenófoba. Si fracasa, su leyenda podría inspirar a futuras generaciones de Enanos descontentos, convirtiéndose en un mártir eterno para aquellos que creen que la verdadera fuerza de un enano no se mide en lo que construye, sino en lo que es capaz de destruir. Grakkor Manorrota es, en esencia, el alma fracturada de Valtoria, y su destino determinará si la montaña resiste o se desmorona en polvo.