agrupacion: Casa Grilletesombrío alianzas: - Corona de Valtoria (Reina Valeria Bronzebrillo) - La Torre de las Estrellas categoria: Personajes y Agrupaciones ciudad_sede: Verue dg-publish: true edad: 210 escudo: Un yunque de obsidiana agrietado, del que brotan cadenas de plata que envuelven una luna rota de cuarzo. El fondo es de granito gris oscuro. lema: Sostenemos la Oscuridad para que otros vean la Luz. nombre: Baelin el Silente relaciones: Maestro de los interrogatorios y diseñador de celdas de contención mágica. Su silencio es más intimidante que cualquier grito. En secreto, se siente peligrosamente atraído por el poder que contiene, estudiando la naturaleza del caos mágico con una fascinación que roza la herejía. rivalidades: - Cazadores de Sombras - Casa Auris rol: Inquisidor Principal y Escriba Rúnico subcategoria: PNJs tags: - casa grilletesombrío - enano - inquisidor - lithernia - personajes - personajes_y_agrupaciones - pnjs - valtoria tipo: Casa Noble (Funcional) summary: Baelin el Silente, Inquisidor Principal de la Casa Grilletesombrío en Valtoria, es un maestro de las runas y los interrogatorios. Guardián de secretos mágicos, lucha contra el caos interno y externo, manteniendo el equilibrio entre orden y oscuridad.
En los salones de piedra de Valtoria, donde el eco de los martillos celebra la creación, existen sombras que no se forjan con fuego, sino con silencio y deber. Baelin es el arquitecto de esas sombras, el Inquisidor Principal de la Casa Grilletesombrío. No es un Guerrero de primera línea ni un Noble de opulenta corte; es el guardián de los secretos más peligrosos del reino, el carcelero de la magia desatada.
Nacido en el seno de un clan menor de canteros, la vida de Baelin quedó marcada por la tragedia que define a su Casa: la memoria de la catástrofe de Piedrasol. Aunque no la vivió, creció escuchando los relatos del poder incontrolado de un ‘Hijo de la Luna’ y el juramento de Kaelen Picohierro. Su familia no fue aniquilada, pero su abuelo, un prometedor adepto de la Torre de las Estrellas, perdió la razón al intentar estudiar un artefacto prohibido recuperado de las ruinas. Baelin aprendió desde joven que la magia sin control no es un don, sino una plaga.
No se unió a Grilletesombrío por ambición, sino por una convicción forjada en la pérdida. Demostró no tener la destreza de un herrero, pero sí una mente metódica y una paciencia de granito. Su talento residía en comprender la esencia de las Runas, no solo en grabarlas. Ascendió rápidamente de aprendiz de escriba a Escriba Rúnico, diseñando patrones de contención cada vez más complejos, capaces de ahogar la magia más salvaje.
Su apodo, “el Silente”, nació en las cámaras de interrogación. Descubrió que su quietud era un arma más poderosa que cualquier amenaza. Frente a un ‘Cazador de Sombras’ capturado o un Noble corrupto, Baelin no grita; observa, espera. Su silencio se convierte en un vacío que los prisioneros llenan con sus miedos, sus secretos y, finalmente, sus confesiones. Es el maestro indiscutible de los interrogatorios de Valtoria, un arte que ejerce con una precisión escalofriante y sin derramar una gota de sangre.
Su relación con la Corona es de una tensa necesidad. La Reina Valeria Bronzebrillo respeta su eficacia pero rehúye su presencia, pues Baelin es el recordatorio viviente de las amenazas que acechan bajo la superficie de su pacífico reino. Para la Torre de las Estrellas, es un colaborador indispensable; les proporciona datos invaluables sobre magia prohibida, aunque Baelin jamás comparte los detalles más corruptores. Su rivalidad con la Casa Auris es sutil pero profunda: ellos, guardianes de la gloria y la luz de la montaña, ven a Grilletesombrío como un mal necesario, una casa de parias que se manchan las manos con la oscuridad. Baelin, a su vez, los considera ingenuos, ciegos a la frágil línea que separa el orden del caos.
Pero la mayor batalla de Baelin se libra en su interior. Para diseñar una celda, debe comprender a la perfección el poder que va a encerrar. Esta necesidad lo ha llevado a estudiar la naturaleza del caos mágico con una fascinación que lo aterroriza. En la soledad de su scriptorium, rodeado de tomos prohibidos, siente el susurro seductor del poder puro que los ‘Cazadores de Sombras’ persiguen. Su deber es su ancla, pero el abismo al que se asoma cada día le devuelve la mirada, y teme que una parte de él disfrute de lo que ve.
Baelin es un enano de estatura promedio, pero con una delgadez fibrosa forjada por largas vigilias y no por el combate. Su barba, de un color gris acero, está recogida en una única y severa trenza adornada con anillos de plata inscritos con Runas de silencio y protección. Su rostro es un mapa de concentración perpetua, con arrugas profundas alrededor de sus ojos, que son de un gris plomizo, analíticos y rara vez parpadean.
No viste la armadura ornamental de otras casas nobles. Su equipo es funcional y sombrío: * Armadura de Placas de Acero Sombrío: Forjada por él mismo, sin adornos salvo por sutiles Runas de resistencia mágica grabadas en el interior de las placas. * El Tomo de las Cadenas: Un pesado libro encuadernado en piel de basilisco, cerrado con un broche de plata. En él anota, con una caligrafía impecable, los diseños de las celdas de contención, las debilidades de sus prisioneros y sus propias y peligrosas observaciones sobre la magia del caos. * Herramientas de Escriba Rúnico: Un juego de estiletes de plata y cinceles de obsidiana para grabar Runas en metal y piedra. Lleva consigo frascos de tinta especial, mezclada con polvo de gemas supresoras y una gota de su propia sangre, necesaria para activar los sellos más potentes. * Las Manillas del Silencio: Un par de grilletes de acero rúnico que siempre lleva al cinto. No son para sus prisioneros, sino un recordatorio constante de su juramento y del poder que él mismo podría necesitar contener un día.
Baelin el Silente nunca será un Heroes cantado en las tabernas ni un rey recordado en estatuas. Su legado es invisible, tejido con los desastres que nunca ocurrieron, las ciudades que no cayeron en la locura y los ‘Hijos de la Luna’ que fueron contenidos antes de convertirse en cataclismos. Es uno de los pilares silenciosos que sostienen la paz de Valtoria, una paz comprada con una vigilancia eterna y un sacrificio personal que pocos comprenden.
Su impacto más duradero y peligroso será el conocimiento que ha acumulado. Las celdas de la fortaleza de Verue son su obra maestra, prisiones de las que ni los más poderosos hechiceros pueden escapar. Pero es el saber contenido en su tomo lo que representa su verdadera herencia: un compendio sobre la magia prohibida tan completo que, en las manos equivocadas, podría desatar la misma oscuridad que él ha jurado encadenar.
Al final de sus días, Baelin será recordado como el enano que miró fijamente a la oscuridad para que otros pudieran vivir en la luz, sin que nadie supiera jamás si la oscuridad también encontró un hogar en él.